La Dulzura, la Calidez, la Nutrición, la Guía,
la Reconexión con nuestra Sabiduría Interior durante nuestra Transformación Alquímica ...
la Energía Arquetípica de La Gran Madre ...
que es HATHOR, que es CACAO ...
que es la Belleza y el Poder del Puro AMOR Incondicional.
Siempre me ha gustado conectar con las representaciones arquetípicas de Venus. Más recientemente, me he sentido profundamente fascinada por la antigua diosa egipcia Hathor.
Como tantas emanaciones de la fuerza arquetípica de Venus y el Amor, Hathor también representaba la belleza, el arte, la música, la danza, la armonía, la abundancia, la fertilidad, la maternidad, la sensualidad, la alegría y el placer.
Y al prepararme para un viaje especial a Egipto, y al leer el cuarteto de libros de la Dra. Alison M. Robert sobre Hathor -incluida su publicación más reciente, La alquimia de Hathor: las antiguas raíces egipcias del arte hermético- fue una alegría descubrir el poder alquímico que esta antigua diosa primordial también representaba en relación con el cosmos y Kundalini, la fuerza vital creativa serpentina del universo.
¿Es posible que los antiguos egipcios compartieran el cacao con los antiguos Mayas y los antiguos Pre-Incas?
Por supuesto que sabemos cómo el loto azul y la acacia eran sagrados para los Antiguos Egipcios... pero si descubrimientos como los glifos Mayas en el templo de Saqqara en Egipto revelan que los Antiguos Mayas pudieron haber estado en el Antiguo Egipto.
Si los descubrimientos arqueológicos en lugares como Montegrande en Cajamarca, Perú están revelando que el cacao se consumía en antiguos sitios rituales y ceremoniales hace 5000 años (anterior a la época del cacao en mesoamérica por 1500 años). Y si estas antiguas culturas estaban todas conectadas por las Antiguas Estrellas (como Sirio) y por portales (como los del Lago Titicaca)?
¿Podría ser posible que el regalo cósmico del Cacao también haya sido compartido y experimentado en el Antiguo Egipto?
En el Antiguo Egipto, Hathor era conocida como la Diosa de los Ojos de Serpiente, y sus sacerdotisas se dedicaban a la activación de la Fuerza Vital Kundalini en sus cuerpos, que entendían como sus templos más sagrados.
Mientras estaba en el Templo de Hathor en Dendera, Egipto, un templo tan bellamente dedicado a los movimientos astronómicos del Cosmos, fue fácil leer el simbolismo hermético:
«Hathor, la Gran Madre ... Hathor, la Madre Cósmica ... Hathor, la Vía Láctea ... Hathor, la Diosa del Cielo ...Hathor, Dama del Cielo .... Hathor, Diosa del Amor y del Cosmos ... Hathor, Diosa de la Belleza y de la Fuerza Vital Kundalini ... Hathor, la Serpiente Cósmica de la Creación ...»
A lo largo de milenios, ha habido una profunda conexión con esta Fuerza Creativa Serpentina en muchas Civilizaciones Antiguas. Los antiguos mayas (a través de su deidad serpiente alada Kukulcán) y los antiguos incas (a través del Espíritu de Pachamama, también conocida como Gaia, la Tierra) también veneraban la Energía Serpentina de la Creación, la Espiral.
Los Antiguos Egipcios relacionaban a Hathor con Venus, y los Antiguos Mayas -además de su preciso conocimiento del cosmos y su profunda conexión con cacao- también relacionaban a Kukulcán con el planeta Venus. En su mitología sagrada, los antiguos mayas creían que Kukulcán (conocido como Quetzalcóatl por los antiguos aztecas) trajo la sabiduría universal y el don sagrado del cacao a la humanidad.
A lo largo de milenios, ha habido una profunda conexión con la Fuerza Creativa Serpentina del Universo en tantas civilizaciones antiguas.
Al igual que los antiguos egipcios, los antiguos mayas/aztecas (a través de su deidad serpiente alada Kukulcán/Quetzalcoatl) y los antiguos incas (a través de la fuerza vital de Pachamama, también conocida como Gaia, la Tierra) también veneraban la energía serpentina de la creación, la espiral.
Theobroma cacao, el nombre científico del Árbol Sagrado del Cacao, se traduce literalmente como «alimento de los dioses», pero más que ayudarnos a conectar con las fuerzas externas de la creación, está destinado a guiar nuestra conexión con las Fuerzas Creativas Internas. En los antiguos mitos de la creación del Popol Vuh, se dice que el cacao fue un regalo de Kukulkán/Quetzalcoatl, la Serpiente Cósmica, a la humanidad.
La energía de la serpiente cósmica también está profundamente conectada con la Antigua Diosa Egipcia Hathor, la Diosa con Ojos de Serpiente, como describe la Dra. Alison Roberts en sus muchos libros e investigaciones sobre esta antigua diosa primordial, pero especialmente en su cuarto brillante libro, La Alquimia de Hathor: Las Antiguas Raíces Egipcias del Arte Hermético.
El cacao de grado ceremonial, debido a su alta calidad vibratoria, aporta sanación alquímica a nuestros corazones, sirviendo para potenciar nuestra medicina interior y nuestras intenciones sagradas. Y una taza caliente de cacao siempre se siente como el abrazo reconfortante de la Gran Madre.
Además, la forma de la vaina de cacao también refleja la vesica piscis, el patrón geométrico sagrado que se repite en la Semilla de la Vida, a partir del cual se crean todos los patrones de armonía, Belleza y equilibrio en el universo. Así pues, la vaina de cacao encarna literalmente el concepto del Fruto de la Sabiduría del Árbol del Conocimiento. Y es quizás por ello que podemos sentir que el consumo ritual y devocional de cacao de alta vibración, además de los beneficios físicos y el bienestar emocional que proporciona, nos ayuda a armonizar nuestro mundo interior, mental con emocional, mente con corazón.
«Sólo con el Corazón se puede ver correctamente. Lo Esencial es invisible a los ojos». ~Antoine de Saint-Exupéry
Además, la correlación energética de las Plantas con los Planetas ha sido estudiada desde tiempos inmemoriales.
Desde la perspectiva del cosmos, el planeta Urano, el símbolo arquetípico de los avances y grandes despertares, en su correlación energética con Acuario y su glifo que simboliza una doble corriente eléctrica, también representa la Fuerza Vital Creativa Serpentina del Universo. Como enseña Adriana Ayales-Shaman, astróloga, herbolaria, fundadora de Anima Mundi Herbals, el Teobroma cacao está en resonancia armónica con Urano (además de Venus), así como con la corriente electromagnética de la Tierra.
En astrología evolutiva, Plutón representa nuestra alma. Plutón también representa la alquimia, la regeneración y la transformación. Nuestras cadenas de ADN también están regidas por el planeta Plutón.
Así, cuando Plutón comienza su tránsito sobre Acuario en 2024, y a través de la correlación del cacao con Urano (el regente de Acuario), las conexiones se hacen evidentes:
~Theobroma cacao -en su correlación con la Fuerza Vital Creativa Serpentina del Universo- está destinado a estar aquí como un Gran Despertador y poderoso nutriente para la transformación de nuestro ADN en su Energía, Frecuencia y Vibración más Elevadas.
~Plutón ... Escorpio ... Regeneración ... Transformación ... Renovación ... Nuestro verdadero y profundo poder ...
~Acuario ... Urano ... El Gran Despertador ... El Aguador ... Las corrientes de Kundalini ...
~Venus ... la Luna ... la Tierra ... la Espiral ...
~Hathor, la Diosa Cósmica con Ojos de Serpiente ... Kukulkán/Quetzalcoatl, la Serpiente Emplumada ... la Creación ...
~Cacao ... la Semilla de la Vida ... el Fruto de la Sabiduría ... el Conector Fluyente ... el Guardián Nutritivo de nuestra Iniciación ...
~La Fuerza Vital Creativa Serpentina del Universo.
~El Poder Curativo del Corazón.
Cynthia E. Honores
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